Alivio de la deportación

En muchos casos, una persona con una orden de deportación puede retrasar o evitar la deportación a través de varias formas de reparación. Estos tipos de alivio incluyen (pero no se limitan a):

1) Salida voluntaria;

2) Cancelación de deportación basada en residencia continua en los EE. UU.:

3) Ajuste de estatus a residencia permanente;

4) Ciudadanía (posiblemente basada en la ciudadanía estadounidense de uno de los padres);

5) Exenciones por fraude, problemas relacionados con la salud o ciertas condenas penales;

6) Asilo, retención de la expulsión o protección bajo la Convención de las Naciones Unidas contra la Tortura (CAT);

7) Ley de Víctimas contra la Mujer (VAWA); y

8) Anulación de condenas penales anteriores.

Además, varias exenciones y excepciones están disponibles con respecto a los motivos de deportación. Por lo tanto, aunque el cliente haya cometido un acto que causa la deportación, ella puede calificar para tal renuncia que impida la expulsión.

Una vez que un juez de inmigración emite una orden de deportación, la decisión puede ser apelada. El proceso de apelación es complejo, lleva mucho tiempo y, a menudo, es frustrante. Sin embargo, en la mayoría de los casos, la apelación permite que el extranjero permanezca y, a menudo, trabaje en el país mientras se procesa la apelación. Si está en un proceso de deportación, necesitará un abogado que lo defienda y lo guíe a través del proceso de apelación.

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